Opinión

En ruta, el nuevo modelo turístico en Quintana Roo

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Campo Minado | Anwar Moguel

Refrendando el liderazgo nacional y regional, Quintana Roo cerró la reciente temporada vacacional de semana santa con cifras sin precedentes, rompiendo los récords incluso de los años más exitosos como resultado de un gran trabajo de promoción y fortalecimiento de la bien llamada industria sin chimeneas, principal motor económico de nuestra entidad.

Fruto de los esfuerzos para posicionar los destinos quintanarroenses en las principales ferias turísticas a nivel mundial y en los foros nacionales del gobierno encabezado por Mara Lezama, arribaron a la entidad más de un millón 250 mil visitantes en tan solo dos semanas, colocando a nuestro estado en ruta para romper la barrera de turistas recibidos en 2018 y 2019.

Pero como hemos mencionado antes en este y otros espacios, lo más destacable no es el baile alegre de números, cifras y estadísticas, sino el fundamento del trabajo que se está realizando con un nuevo enfoque y una nueva misión: la de construir un nuevo modelo turístico, más justo, más humano y más equitativo, cuyos beneficios permeen de manera directa en la sociedad.

Ese es el objetivo que se puso la gobernadora Mara Lezama y por ello no se ha cesado de, por un lado, impulsar la inversión nacional y extranjera, la generación de nuevos tratos, la mejora de la conectividad nacional e internacional, mientras que por el otro se negocia fuerte para que las empresas turísticas grandes y pequeñas se sumen al gran acuerdo para generar una prosperidad compartida.

¿Cómo se logra esto? Con empleos mejor remunerados, que coloquen al trabajador como un activo valioso que debe ser cuidado, con prestaciones de seguridad social dignas que les permita a las familias cubrir todas sus necesidades. Un enfoque, reitero, más justo y humano pero que no está peleado con la productividad y la alta competencia que se requiere para mantenernos en lo más alto de los destinos de latinoamérica.

El trabajo incesante de la gobernadora se refleja también al lograr que el Caribe Mexicano se reafirme cómo potencia regional en conectividad aérea, al mantener rutas directas con 127 ciudades de todo el mundo, logrando movilizar a miles de pasajeros con 58 aerolíneas. En el pasado Tianguis Turístico de México, Mara Lezama contribuyó a la consolidación de las conexiones aéreas de Quintana Roo con el mundo, abriendo nuevas rutas internacionales y mayor frecuencia en conexiones nacionales.

En estas negociaciones de alto nivel no se ha dejado fuera al sur, ya que se puso sobre la mesa la posibilidad de abrir la ruta aérea Guatemala – Chetumal con la aerolínea TAG, la ruta Cancún – Chetumal con una nueva empresa denominada Aerus, y se pretende recuperar la conexión directa con Miami, Florida.

La idea sigue siendo, en primer lugar, mantener el liderazgo turístico en Latinoamérica, hacer crecer nuestros destinos ya posicionados, abrir camino para nuevos destinos en la zona maya y en el sur de Quintana Roo aprovechando la facilidad de transporte terrestre que traerá el Tren Maya, y generar nuevos motores económicos en torno al turismo que permitan llevar la derrama económica a las mesas de las familias en cada ciudad y comunidad.

El nuevo modelo turístico que propone e impulsa Mara Lezama aún se ve en el horizonte, pero el rumbo es el correcto. Lo hecho hasta el momento son tan solo los cimientos necesarios para lograr el objetivo principal: acortar la desigualdad y propagar la prosperidad.

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