Tiro Libre | Anwar Moguel
Novedades Chetumal
Al cuarto para las 12 la Legislatura local aprobó las reformas necesarias para el nacimiento e implementación del Sistema Estatal Anticorrupción el pasado fin de semana, cumpliendo así con este requerimiento federal cuya fecha perentoria era el 18 de julio.
Dentro de las reformas diseñadas para combatir la corrupción dentro de las dependencias gubernamentales y organismos autónomos existen una serie de puntos muy interesantes y otros bastante polémicos, sin embargo los diputados de todas las bancadas reconocieron la importancia de contar con esta herramienta, cuya eficiencia aún será puesta a prueba.
Uno de los puntos centrales de este sistema estatal anticorrupción es la asignación de contralores para cada uno de los organismos autónomos del estado como el IEQROO, IDAIPQROO, CDHEQROO y la Fiscalía, entre otros, los cuales tendrán la tarea de vigilar la dinámica interna de estos órganos para evitar desvíos presupuestales y otros actos de corrupción.
Estos contralores serán nombrados por la diputación permanente del Congreso local y responderán por su trabajo directamente al Congreso, no a los titulares de los organismos.
También se aprobó la creación de la Fiscalía Especializada del Combate a la Corrupción, que dependerá de la Fiscalía General del Estado, y del Tribunal de Justicia Administrativa, encargado de juzgar los diversos actos de corrupción en los que puedan incurrir los servidores públicos.
Tanto el Fiscal anticorrupción como los magistrados del nuevo tribunal serán nombrados por los diputados locales, quienes por única ocasión eliminaron el requisito de experiencia en materia de fiscalización y combate a la corrupción de quienes ocuparán estas magistraturas, lo que causó mucha extrañeza.
Con el andamiaje del sistema estatal armado y definido, es cuestión de tiempo nada más para que se ponga en marcha, y será entonces cuando la eficiencia de la herramienta diseñada se compruebe a nivel de campo.
Porque si bien el combate a la corrupción es un asunto que preocupa en serio en un estado que ostenta el primer lugar de corrupción dentro de uno de los países más corruptos del mundo, no hay garantía que la estructura burocrática diseñada para hacer frente a este mal no caiga en los mismos vicios de los que pretenden vigilar.
Las posibilidad de que este sistema anticorrupción tenga éxito por sí solo son reducidas. Para que en realidad sea la herramienta eficaz que todos queremos, los ciudadanos tendremos que tomar un papel protagónico, con acciones coordinadas para demandar limpieza en el ejercicio gubernamental, como la que realizaron recientemente un grupo de empresarios que pretenden poner fin a la arraigada costumbre de los “moches”.
Sin acción ciudadana, las armas burocráticas contra la corrupción siempre serán insuficientes.