Chetumal, 19 de septiembre
Anwar Moguel
Un operativo coordinado en el que participaron unos 600 elementos de la Policía Estatal, Policía Municipal, Ejército Mexicano, Policía Ministerial, Policía Federal y Marina para trasladar a 38 internos del Cereso de Chetumal hacia otros penales del país, entre ellos el líder del “autogobierno”, Heriberto Campos Martínez, alias “El Diablo”, derivó en un enfrentamiento que dejó un saldo de siete elementos y cinco internos heridos; uno de los policías resultó con fractura de mandíbula tras sufrir el impacto de una bala de goma.
El amplio operativo inició durante la madrugada de este miércoles, siendo el objetivo principal el traslado del líder del autogobierno, quien fue protegido por un grupo de reos de manera violenta.
Entre los trasladados se encuentran personas que purgan condenas por violación, delincuencia organizada, robo calificado, secuestro y homicidio, y de ese grupo los más peligrosos eran conocidos con los apodos de “El Frijol”, “El Poli”, “El Sexi” y “El Diablo”.
Tras el operativo que dejó una docena de heridos, tres de ellos de gravedad, el titular de Seguridad Pública en el estado, Rodolfo del Ángel Campos, aseguró que no se permitirá que exista ningún otro autogobierno en la cárcel de Chetumal, como el que comandó por espacio de siete años el interno conocido como “El Diablo”.
“Este miércoles llevamos a cabo un operativo conjunto para extraer a 38 internos del Cereso de Chetumal y trasladarlos a distintos penales federales, los cuales controlaban al interior de la cárcel. La resistencia provocó un enfrentamiento con un saldo de siete compañeros lesionados al igual que cinco internos”, informó el funcionario policiaco.
Debido a este operativo, un acceso a la ciudad por la prolongación Álvaro Obregón estuvo cerrado por más de seis horas, además de que el perímetro del Cereso fue cercado por elementos de la policía estatal debido a la llegada de familiares de internos preocupados por la tensa situación que se vivía en el penal.
Cabe destacar que aunque no está confirmado, se rumora también que fueron trasladadas la ex funcionaria estatal Karla Blancas Pizaña y su hermana Gabriela, quienes están acusadas de asesinar al cónyuge de la primera y que ya tenían roces graves con otras internas del Cereso.