En Órbita | Marcelo Salinas
SIPSE
Los factores de éxito se miden de manera diferente en los municipios, aun cuando se reconocen rasgos comunes cuando sí contribuyen. Por ejemplo, que las autoridades se planteen una visión integral, de consolidación democrática; que sus acciones beneficien ante todo a la ciudadanía, con nuevos instrumentos participativos, transparentes y eficientes, en tanto reducen la burocracia y la corrupción, entre tantos otros.
Hay cinco en particular que llaman la atención de los especialistas. En Benito Juárez, el de mayor importancia política y económica, el gobierno comienza el desarrollo de algunos que deberán consolidarse durante los próximos tres años. Su presentación aquí no es jerárquica ni supone cuán avanzados están. Veamos:
Se forma un liderazgo dinámico. Mara Lezama se ha rodeado de colaboradores efectivos. El factor humano hace a las instituciones. Y aunque no a todos convenzan, en su equipo hay servidores públicos, heredados de otras administraciones, eficientes en su rol. Hay nuevas y nuevos con alta participación: Hugo Alday, Gloria Torruco (con su condición honoraria), Sergio de Luna, Anahí González y más líderes natos, cuyo análisis es materia de otra entrega.
Se perfecciona una comunicación enérgica. Se sabe que hay una especie de reingeniería interna en Comunicación Social, y en todas las áreas con difusión, para mejorar tal proceso, buscando la precisión y, sobre todo, la claridad. Lezama Espinosa es una comunicadora con experiencia probada y reconocida; por lo tanto, seguramente vigila desde muy cerca dicha tarea transformadora.
En cuanto a la negociación y el manejo de conflictos (el tercero de los aspectos), ha sido demostrada la voluntad de buscar los consensos suficientes. Se ha visto acuerdos con los regidores, los transportistas, los ecologistas y otros sectores. En dichos temas, los “negociadores” del Ayuntamiento han privilegiado el trato respetuoso, sin olvidar sus metas. Ejemplo: limpiar Tajamar implica un guiño a un grupo, pero el mensaje es para todos los interesados en el desarrollo sustentable.
Están además trabajando en equipo. Se integran al círculo cercano colaboradores nuevos y funcionarios antiguos persiguiendo intereses colectivos. Relatan puertas adentro que se siente otra “vibra”, cuya sinergia se empieza a constatar con esa comunicación diferente, todavía en ciernes, planteada anteriormente.
Por último, que el gobierno en su conjunto sea participativo. Con las consultas para elaborar el Plan de Desarrollo Municipal, vía digital, así como los foros en planeación, queda claro también cuál es el ánimo: integración, inclusión e imparcialidad.
