CDMX, 20 de agosto
Misael Zavala y Carina García | El Universal
Ante la cúpula de Morena reunida en el 5to Congreso Nacional Extraordinario, el primero que realizan como gobierno electo, Andrés Manuel López Obrador lanzó advertencias a sus correligionarios para no “encaramarse” (colocarse en una posición alta) ni que haya desviaciones o que el pragmatismo destruya a su organización, que se coloca como una de las principales fuerzas políticas del país.
Les pidió dejar de lado la corrupción, el amiguismo, el nepotismo y esas “lacras de la política”.
“Para que no haya influyentismo, corrupción, sectarismo, ninguna de estas lacras de la política se requieren los ideales. Gente que esté dispuesta a heredar pobreza a sus hijos, pero no deshonra. No queremos la politiquería, llegar por llegar, no es encaramarnos en los cargos públicos sin un ideal, sin un principio. Que el pragmatismo no arrase y que, sin ideas ni principios, se destruya nuestra organización”, expresó.
Prometió no decepcionar y no van a actuar “como dirigentes, que al llegar al poder se traicionan y a sus seguidores”.
Recordó que en 2000, cuando se registró la victoria de Vicente Fox en la Presidencia, se apostó a la alternancia que al final él calificó como “una farsa dañina”.
Para evitar que eso se repita, López Obrador pidió “dejar una cosa o situación para tomar otra. No es más de lo mismo, no es la simulación o el gatopardismo. Transformar no es ejecutar o dar el violín, instrumento que se toma con la izquierda y se toca con la derecha, lo nuestro es auténtico y será distinto”, afirmó.
A los senadores y diputados federales entrantes, puso como ejemplo que en la pasada legislatura Morena votó en contra del gasolinazo.
“Ojalá y esto sirva de lección a diputados y senadores entrantes para no escuchar, taparse los oídos y ponerse cera y no escuchar el canto de las sirenas.
“Y no olvidar que el poder sólo tiene sentido y se convierte en virtud cuando se pone al servicio de los demás”, aseveró.
El Congreso Nacional en el deportivo Reynosa de Azcapotzalco también sirvió para que López Obrador pidiera apoyo para la aprobación de la escuela de formación de cuadros de Morena y aplicar un programa de austeridad, en el que adelantó que pedirá a sus legisladores sacar de la congeladora la iniciativa de Pablo Gómez —que impulsó el ex perredista desde 2003— para que ningún servidor público en los tres poderes, ni dependencias autónomas ganen más que el Presidente de la República.
Entre sus propuestas buscará convertir en delito grave, sin derecho a fianza, el robo del presupuesto, así como también grave la emisión de facturas falsas y el fraude electoral.
Recordó que está en proceso de consulta la construcción aeroportuaria para que decida el pueblo.
Ante la cúpula de Morena, gobernadores electos de cinco estados, así como de dirigentes, afirmó que el triunfo logrado parece todavía un sueño, pero obviamente es una “bella realidad”.
Flanqueado por Claudia Sheinbaum, jefa de Gox