Tiro Libre | Anwar Moguel
Novedades Chetumal
La semana pasada el Congreso local recibió los proyectos presupuestales de los órganos autónomos del gobierno estatal para derrochar, perdón, para ejercer en el 2018, y en todos los casos sus juntas de gobierno autorizaron jugosos incrementos que no corresponden a su productividad.
Por lo visto, estos órganos, que de autónomos solo tienen el nombre, están decididos a tomar cada año una tajada más grande del pastel del erario.
El año pasado la Legislatura “del cambio” fue por demás generosa con estos órganos, que nos costaron a los quintanarroenses 822 millones 632 mil 104 pesos, de los cuáles la mayor parte correspondió a la Fiscalía.
Pero vayamos desglosando los casos más representativos. A finales de 2016, el Tribunal Electoral de Quintana Roo (Teqroo) todavía bajo el mando del cuestionado magistrado Víctor Vivas Vivas, logró que el Congreso le aprobara un presupuesto con un “aumentito” de casi cinco millones de pesos, pues pasó de poco menos de 32 millones en 2016 a casi 37 millones en 2017, a pesar de que en este ejercicio no hubo elecciones.
Pues ni con eso quedaron conformes los magistrados electorales, ahora dirigidos por Nora Cerón González, y ya que calaron la esplendidez de los diputados están solicitando para 2018 ¡48 millones de pesos!, un incremento del 30 por ciento en relación al presente año.
Para no quedarse atrás, el Instituto Electoral de Quintana Roo también preparó un presupuesto desproporcionado aprovechando la coyuntura de las elecciones locales del próximo año, de 319 millones de pesos, mientras que el año pasado recibieron poco más de 130 millones.
El argumento de un mayor gasto por la organización de las 11 elecciones a Ayuntamientos pudiera sonar coherente, pero el mismo Consejo del Ieqroo no aprobó el desmesurado presupuesto, metiendo en serios aprietos a su titular, Mayra San Román Carrillo Medina, que una vez más quedó expuesta por su incapacidad.
El columnista Julian Santiesteban expuso en su cuenta de Facebook la postura del Consejero electoral Luis Carlos Santander, quien desnudo al organismo local al compararlo con Yucatán, estado que asignó a su OPLE un presupuesto solo 40 millones superior al que pide el Ieqroo, y con eso deberá organizar elecciones en 95 Ayuntamientos, de 25 diputados locales y de su gobernador. Ese comparativo exhibe la desmesura presupuestal del organismo quintanarroense.
Para no quedarse atrás, la Cdheqroo y el inútil Idaipqroo también pusieron sus cartitas navideñas con presupuestos inflados para el 2018. El Ombudsman Harley Sosa está pidiendo 66 millones de pesos, cantidad que representa 26 millones más que lo recibido en 2016, mientras que el Idaipqroo también fijó su pico en 60 millones, lo que representa un incremento brutal en relación a su presupuesto de 2016, que fue de poco más de 26 millones de pesos.
¿Aprobará el Congreso ese injustificado derroche de dinero público en organismos inoperantes y desacreditados? Lo sabremos dentro de pocos días.